Porque es rozar tu piel y sentir un escalofrió recorrerme por dentro, sentir tu mano descender por mi espalda, suave, dulce y cuidadosamente. Notar tu respiración cerca de mi despierta las mariposas que invaden mi estomago, se mueven inquietas al notar tu presencia, el nervio las recorre al disfrutar con las fragancias que desprende tu pelo, llegan a la locura al sentir tu cuerpo rozar el mío entre las sabanas.
Nuestras miradas se encuentran, no se dicen nada y a la vez lo dicen todo, suspiras y me rio, te acercas despacio calculando la distancia que debemos mantener y dándote un vuelco el corazón te saltas las distancias. Tus labios chocan con los míos resolviéndome esas preguntas que solo puede descifrar tu piel. Me abrazas y susurras a mi oído te quiero, en ese momentos las agujas del reloj se paran, el mundo deja de girar y tu y yo somos el centro de nuestro propio mundo compartiendo habitación con el calor, la alegría, el deseo, el amor, la sensualidad y la pasión.
Es lujuria lo que inunda nuestros cuerpos, es el éxtasis que me recorre el decir tu nombre una vez mas, es tenerte cerca, sentir que nuestras almas se fusionan y que lentamente pasan a formar una sola pieza. Te beso, me besas y todo sigue su camino dejando entre las sabanas las palabras que una noche escuche al oír tu voz.